domingo, 31 de mayo de 2009

Duele...

Se quebró la belleza del amanecer
Y junto a ella, nuestras ilusiones.
Se acabó la lluvia
Y se apagó lentamente su aliento…
Que también era mío.
Y de nuevo la oscuridad visita mis sueños,
Dejándolos tan secos de sonrisas
Y tan empapados de soledad.
Quisiera arrancarme el corazón del pecho,
Remendar con estrellas
Esta alma rota que hoy se estanca en mi noche.
Duele,
Duele como mil puñaladas de dolor,
Como si en tu ausencia
Yo pudiera contemplar las rosas
Que forraron con espinas este amor.
Pero no importa nada,
Porque mis manos ya no pueden regresarte la luz,
Porque mis pasos ya no pueden regresarte tus caminos
Y yo,
Yo no puedo desenterrarte con mis lágrimas
Aunque estas ganas de llegar a tu cielo
Me ahoguen.
Mírame,
Mírame,
Aun lloro tu partida
Y esta vida se ha vuelto más mierda
Que de costumbre.
Desde que te fuiste yo no soy yo
Y si lo soy, no me conozco…
Mas un sigo intentando encontrar
Un silencio perfecto
Para depositar mi amor
Y guardarlo hasta el día
Que pueda volver a tus brazos…

Dices...

Dices que no sabes de poesía
Mas tu cuerpo ha sido refugio
De mis besos, de mis caricias
Y de esas otras cosas
Que sólo tú conoces,
Donde los únicos testigos
Fueron la noche
Y la desnudez de nuestros cuerpos.
Dices que no sabes que es un poema
Cuando con tus labios
Has escrito hermosos versos
En la profundidad de mi cama.
Dices que no distingues
Un poeta de un simple mortal
Aunque tus manos,
(Bañadas de estrellas)
Inspiran mi caminar…
Entonces dime:
¿Qué es poesía?
¿Qué es un poema?
¿Qué es un verso?
¿Qué es un poeta?
Porque para mí,
Tú eres todo eso
Y aun más,
Y aun mucho más…

Bajo tu recuerdo

Una noche perfecta
Bajo tu recuerdo
Que lentamente se apaga
Mientras se quiebra mi voz
Quiero gritar que ahora
Murieron mis sueños
Quiero encontrar la sonrisa
Que pueda borrar este miedo
Pero antes dime,
Mi amor,
¿A dónde se fue?
¿A dónde se fue nuestro cielo?

Entre muertos...

Cae de nuevo la noche
En mi silencio,
Solo una noche
Para creer que vivo
Entre estos muertos,
Para sentir que aun no emprendo
El viaje sin retorno a tus brazos.
Cae de nuevo la noche
En mi locura,
La luz de tus ojos se refleja
Entre grises y mañanas
Sigo empecinada en buscar los sueños
Cuyos caminos marcó tu amor
(Aunque a su vez,
borró la inspiración de mi despertar)
Y empiezo a creer
Que vivo rodeada de muertos,
Si, de muertos:
Palabras
Sueños
Sonrisas
Abrazos
Estos los motivos de mi oscuro penar.
¡Son muertos!
Están muertos porque no tienen días,
La noche no los cobija,
Las estrellas no los adornan…
Mas yo que conocí
Cuanto secreto existe de tu cuerpo
Regué los jardines congelados
De mi conciencia
Para verterme desnuda
En el oleaje del recuerdo

lunes, 18 de mayo de 2009

... a mi ángel ausente...

Desde que no estás
La lluvia sabe a vacio,
Mis versos no tienen más sentido
Que esta pálida melancolía
Buscando encerrarse
En tus noches de ausencia

Aun sigo buscándote, ángel mío
En las formas que toman las nubes
Al atardecer,
En el absurdo miedo
A no encontrarte en mis versos
Y en esta estúpida rutina
De inevitable ansiedad empobrecida

Acaso no ves que sin ti no soy yo?
Que es en tus ojos donde encuentro
Lo perfecto y mi condena?
Que son tus manos el valor
Para mi lucha perdida
Entre suspiros y deseos?

Dónde estás, ángel mío?
Por que no vienes a aliviar
El peso de estas lagrimas nocturnas
Disfrazadas de distancia?

Por qué no traes la paz
Que tanto busque en tu abrazo?
Si, se que todo cambia
Pero tu ausencia me mata

Desde que no estás,
Esto no se llama poesía
Tan solo es un intento desesperado
Por encontrarte en mi alma, junto a mis sueños

Vuelve!
Aunque no revivas mi cuerpo,
Regresa a darle sentido a estos versos
Sedientos de tu esencia

... entre el poeta y el angel

Ángel mío,
Te ofrezco un atardecer perfecto
a cambio de un beso...
¿No es suficiente?
Entonces, te regalo cada uno de mis versos
No pido más que un beso.
No tengas miedo,
nadie nos observa.
No, tampoco existe el tiempo
solo tu, yo y este infierno.
¿Tu dios?
El no podrá vernos
y esto será
nuestro más grande secreto.
De prisa,
coge mi mano y caminemos...
¿A dónde vamos?
No lo pienses,
déjate llevar.
Tampoco dudes,
no tengas miedo
yo cuidare tus pasos
¿Ya viste los azules del cielo?
Son tan hermosos,
casi tan bellos como tus ojos
¿Por qué tiembla tu cuerpo?
No tengas miedo...
Ángel mío, es solo un beso
un beso para llenar de vida mi poesía,
para alumbrar la oscuridad de mis miedos,
para que entiendas que hay un alma
que brilla solo para ti...
Aunque tu cielo y mi infierno estén lejos.
¿Una promesa?
No, los besos no atan...
Dan libertad porque rompen cadenas.
Camina, no te detengas
ya casi llegamos al final...
Ven,
Abrázame un instante,
te regalare una estrella
aunque ya poseas una constelación.
¿Detenemos el tiempo?
No, tu Dios no puede vernos.
Abrázame, aquí, ahora,
acaríciame y no tengas miedo
veras que no hay miradas sobre nosotros.
Ángel mío,
ya tienes que irte:
Está empezando a amanecer
y yo ya empecé a amarte!

... entre el poeta y el angel II

¿Qué quieres, ángel mío?
¿Por qué me invitas a contemplar
La inocencia de las estrellas?
¿Qué pretendes hacerle sentir
A estos restos de mi alma?
¿Por qué compartir conmigo el cielo,
Si tu cielo ya está habitado?
Dime,
¿Para qué callar mi poesía
Si los versos que se desprenden de tu mirada
No caben en un poema?
¿Para qué enmudecer un instante de luz
En tus manos?
Es que no comprendo estas ganas acrecentadas
De querer llegar a tu lado
Y desnudar uno a uno
Los misterios de tu alma.
¿Un suspiro?
Ángel mío,
¿Por qué nos invadió el silencio?
¿Por qué nos ha tocado el recuerdo
De la distancia que se dibuja
Entre mi piel y tu alma?
¡No cierres los ojos!
¡No alces vuelo hacia la tierra de los sueños!
¿No ves que no hay nada más hermoso
Que esta noche en que las lágrimas cristalinas
Bailan alegres frente a ti?
¡Y el firmamento sólo es una versión difusa de tus ojos!
¡Espera!
¡No cierres los ojos!
Quiero ver el cielo contigo,
Aunque no esté a tu lado.

... entre el poeta y el angel III

Y vuelvo a encontrarte, ángel mío,
En mis sueños,
En ese espacio de luz
Que sólo llena tu sonrisa.
Dime,
¿Qué buscas en este suelo?
¿Por qué hurgas las heridas
Que yacen en mis noches vacías?
Te he visto acariciando con tus hermosos ojos mis atardeceres,
Mas nunca has compartido conmigo
Ni el simple recuerdo que deja una estrella fugaz.
¿Por qué tanto silencio?
¿Acaso no merezco más que un gesto?
Háblame,
Te he encontrado en mis sueños
Y no eras un reflejo,
Eras tan real
Que al partir
Dejaste un inmenso dolor en mi pecho

... Bajo una noche perfecta

Sentí
Como el silencio lo envolvía todo,
Mis manos no encontraban quietud
Y tú estabas ahí…
Podía tocar el cielo
Solo con verte
Y mirar el horizonte de mis sueños
En tus ojos.
Sentí
Que podía contra todo,
Que no había tormenta ni miedo
Imposible de vencer
Porque seguías ahí
Y no precisamente en un verso.
Sentí
Como mi alma gritaba angustiada
Pidiendo LIBERTAD,
Las cadenas que me ataban,
Parecían por fin romperse…
¡Y quise besarte!
Sentí de mis labios brotar una sed insaciable
Que quería llenarse de ti:
Para hacerme vivir
Y darle sentido a mi locura,
Para ver materializado un suspiro
Y así consumar un poema
Cuya esencia es tu nombre.
Sentí
Como el tiempo derrumbo mi propia tempestad
Y se volvió mi enemigo.
Sentí
Un leve frio acariciar mis latidos,
Y fue cuando supe
Que mi beso había muerto
Al tocar la realidad,
En un simple pensamiento…¡fugaz!
Mi beso había muerto
Al no poder alcanzar tus labios:
Murió de pena
Murió por el anhelo
De querer encontrar morada en ti
Simplemente murió.
Sentí
Un beso que murió
En el vacio de mi pecho,
O tal vez en lo complejo de mi razón
Y entonces mi alma
También quiso morir
Bajo una noche tan perfecta
En la que ni Dios podía vernos.
Porque nos cubría la sombra del mar,
Porque no había más testigos
Que tu, yo y este infierno…
Que solo buscaba redimirse
Con tu beso